Una de las mejores soluciones

Actualmente la parada de segundero es algo que damos por hecho en los relojes, y nos facilita mucho el poder sincronizar la hora al segundo, poniendo identificar si algo funciona o no como es debido. Sin embargo esto no siempre fue así y en una época en la que los relojes eran puras herramientas, para la sincronización de algunas operativas especialmente militares, era necesario hacer algo.

Y ahí entra la patente de EE. UU. 2008734 que de forma inteligente en lugar de meter mano a los calibres, se centraba en un sistema mediante un bisel giratorio y una corona de bloqueo que permitía sincronizar varios relojes.

El autor de esta patente era P.V.H. Weems, que destaca por diferentes logros, muy dispares, como formar parte de la selección para el equipo de lucha libre de los Juegos Olímpicos de 1920, Comandante de Convoy para flotas en la Segunda Guerra Mundial, Instructor de la Academia Naval y además obtuvo la distinción de "El mejor navegante vivo de su tiempo”.

Pero no se quedó ahí la cosa ya que reescribió los principios sobre la navegación aérea y celestial. Pero bueno, me voy por la tangente, recapitulo al reloj.

Como he dicho antes, es una patente bastante inteligente pues en lugar de la modificación de un calibre, se apoyaba en elementos externos. Weems no era relojero y ponerse investigar sobre esto hubiera sido un caos. Por no decir lo complicado que hubiera sido que alguna marca le hubiera comprado la idea de fabricar los relojes.

De esta forma la patente en manos del ejército de los EEUU permitió que aunque inicialmente Longines fabricase relojes Type A-11 Weems para los pilotos de la USAAC, al no necesitar modificar los calibres, facilitó que otros fabricantes como Zenith, Omega, LeCoultre y Movado ampliasen el suministro, ya que se había incrementado demanda de forma exponencial con la Segunda Guerra Mundial y asumir toda la producción por parte de Longines era imposible.

Además al ser aliados Estados Unidos y Reino Unido, el uso de esta patente se extendió también a la RAF para que pudieran equipar a sus pilotos y poder trabajar de forma conjunta. De esta forma nacieron algunas variantes entre ambos, especialmente si nos centramos en el diámetro, siendo las unidades de Movado, Omega y Zenith fabricantes exclusivos de la RAF y con un diámetro mayor.

Personalmente este reloj me parece una pieza muy interesante, al juntar en un mismo reloj muchas características muy buscadas, como el uso militar y que el reloj haya visto muchas cosas, marcas históricas y sobretodo, un ingenio para solucionar problemas que va más allá de pensar en una solución rápida. El problema aparentemente era parar el segundero y solucionaron el problema sin que parase la aguja.

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